Brasil, 1918 y 1919, oleada de huelgas. Consiguieron la jornada laboral de 8 horas.

Oleada de huelgas en Brasil, y II.

Luchas obreras rescatadas del olvido

Agenda

Brasil -1917 ⁄ 1919-

Dibujo. Obreros en huelga. (con octavillas en la mano)

Oleada de Huelgas -y II-

(viene del domingo 16 de abril)

… /… Nacieron otras, como la Unión de Trabajadores de Río de Janeiro (UGT), como un intento de unificar a los sindicatos más cercanos a una línea de resistencia.

En 1918, el impacto de la Revolución de Octubre llevó a los obreros a plantearse las formas que debían adoptar para la toma del poder, aunque sin ningún resultado positivo. Faltaba una estrategia única y la ausencia de organizaciones revolucionarias de vanguardia. El mejor ejemplo fue la insurrección fallida del Campo de San Cristóbal, en la que un contingente de trabajadores dirigido por la Alianza Anarquista intentaron formar un gobierno presidido por consejos de obreros y soldados, de clara inspiración soviética. Los obreros esperaban la alianza con los soldados, pero estos los traicionaron y no acudieron al llamamiento, dejando a los trabajadores a merced de las tropas de choque. Después de la masacre, 200 personas fueron detenidas y los líderes del movimiento acabaron en la cárcel.

En 1919, la oleada de huelgas tuvo un repunte. El 1º de mayo miles de trabajadores de Río y São Paulo se manifestaron a favor de los soviets rusos y las iniciativas revolucionarias de Alemania y Hungría. En la capital federal, 60.000 trabajadores paralizaron la ciudad para presionar a la patronal a aceptar la jornada de 8 horas. En São Paulo se decretó la huelga general y los piquetes recorrieron la ciudad cerrando todas las fábricas. Así fue como tras varias semanas de huelgas se afianzó la jornada de 8 horas de trabajo sin reducción salarial. En Porto Alegre la movilización adoptó un carácter más violento y los obreros hubieron de echar mano de explosivos contra la planta de Light & Power para doblar el pulso a la compañía. Varios dirigentes fueron encarcelados y un obrero fue asesinado en las manifestaciones posteriores protagonizadas por los obreros de la Unión Metalúrgica y el Sindicato de los Obreros de la Luz.

Como en otros países, la jornada de 8 horas costó muchos meses de lucha y sacrificios para la clase obrera.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.