Alientos de lucha
Agenda
La Guerrilla Soviética
Dimitri N. Medvédev
(Rusia 1898 -1954)
“Aquella noche, nosotros, los camaradas de armas de Nikolai Ivánovich abrimos su carta. Deambulamos durante mucho tiempo por las calles camufladas de Lvov, repitiendo las palabras sin ambages y llenas de valor, leídas por nosotros y desde entonces grabadas para siempre en nuestros corazones. (…) Sentí con más agudeza mí deber de describir a la gente de mi patria la historia de la vida y la muerte de Nikolai Kuznetzov.
“He aquí qué leímos en su carta:
25 de agosto de 1942. A las veinticuatro horas cinco minutos he descendido del cielo en paracaídas, para vengar implacablemente la sangre y las lágrimas de nuestras madres y hermanos, que gimen bajo el yugo de los invasores alemanes.
Durante once meses he estudiado al enemigo empleando el uniforme de oficial alemán, llegando hasta la guardia del sátrapa, el tirano de Ucrania, Erick Koch.
Ahora paso a actuar.
Amo la vida, aún soy muy joven. Pero si para la Patria, a la que amo como a mi propia madre, es necesario sacrificarla, lo haré. Que sepan los fascistas de qué es capaz un patriota ruso y bolchevique. Que sepan que es imposible someter a nuestro pueblo, como es imposible apagar el sol.
Aunque muera, en el recuerdo de mi pueblo los patriotas son inmortales.
‘¡Aunque mueras!… ¡Mas en la canción de los audaces y fuertes de espíritu tú serás un ejemplo vivo, un orgulloso llamamiento a la libertad, a la luz!…’
Esto es de mi obra preferida de Gorki. Que la lea con frecuencia nuestra juventud…
Vuestro, Kuznetzov”.
Sobre el autor:
Medvedev era hijo de un trabajador siderúrgico. Durante la guerra civil revolucionaria se unió al Ejército Rojo, en 1920 ingresó en el Partido bolchevique. En el verano de 1941, fue enviado a su región natal de Bryansk para organizar la resistencia clandestina tras las líneas invasoras alemanas. Entre junio de 1942 y marzo de 1944, las unidades de Medvedev se centraron en llevar a cabo sabotajes, ejecuciones y espionaje. De esa experiencia nacería su obra La guerrilla soviética. Otras obras suyas son: El desprendimiento va hacia el oeste, El espíritu fuerte, En las orillas del Bug del Sur. En 1944 recibió el título de Héroe de la Unión Soviética.
-Palabra de guerrillero
Porque mi patria es hermosa
como una espada en el aire,
y más grande ahora y aun
más hermosa todavía,
yo hablo y la defiendo
con mi vida.
No me importa lo que digan
los traidores,
hemos cerrado el pasado
con gruesas lágrimas de acero.
El cielo es nuestro,
nuestro pan de cada día,
hemos sembrado y cosechado
el trigo y la tierra,
y el trigo y la tierra
son nuestros,
y para siempre nos pertenecen
el mar,
las montañas y los pájaros.
Javier Heraud
(Perú 1942 – 1964)