Sangrienta Transición y guerra sucia. 31 muertos en 1977. (3 de 9)

Sobre dibujo revolucionaria muerta «Sangrienta Transición» . 1977.

La transición sangrienta en 9 capítulos

(3 de 9)

-1977

*7 de enero muere en Chirivella (Valencia), José Vicente Casabany, trabajador de Aisina, durante una manifestación. Tenía 31 años y era militante de CC.OO.

*9 de enero, muere en Sestao Juan Manuel Iglesias, de 16 años, al huir de una carga policial tras una manifestación pro amnistía.

*23 de ENERO. MADRID

Arturo Ruiz García. 19 años. Albañil y estudiante. Se había convocado una manifestación en la Plaza de España, en demanda de la amnistía de los presos políticos. El gobierno civil la había prohibido e hizo un extraordinario despliegue policial por la zona. Las cargas fueron violentísimas y los grupos de manifestantes se dispersaron. Algunos llegaron a las calles adyacentes a Callao. Un grupo de cuatro fascistas apareció dando gritos de “Viva Cristo Rey”. Un hombre de unos 50 años, con un abrigo Loden verde, empuñaba una pistola. Dio algún tiro al aire. Junto a él, otro individuo más joven, con un guantelete de hierro en la mano, cogió el arma y disparó directamente al grupo de jóvenes manifestantes que trataban de escapar. Una bala entró por la espalda de Arturo Ruiz y le atravesó el corazón. La policía retuvo a otro grupo de Guerrilleros de Cristo Rey para soltarlos en el acto; en realidad les protegió de los jóvenes que les gritaban “asesinos”.

Las declaraciones de los numerosos testigos permitieron identificar como asesino de Arturo a José Ignacio Fernández Guaza, un matón de 29 años, que hacía trabajos sucios para las fuerzas de seguridad, y huyó sin que hasta el día de hoy haya sido detenido. Su delito, además, ha prescrito. Su pareja de entonces y algunos otros familiares, en declaración ante el juez en 1977 afirmaron que trabajaba para la Guardia Civil o la Policía. “Realizaba funciones que la policía no podía hacer”, dijo su hermana, que añadió que iba con frecuencia al País Vasco” a ayudar a la Guardia Civil con los jaleos de ETA».

*24 DE ENERO. MADRID

María Luz Nájera Julián. 20 años. Estudiante universitaria. Se convocaron en Madrid numerosas manifestaciones y acciones de protesta, sobre todo universitarias, contra el asesinato, el día anterior, de Arturo Ruiz. Unas 115.000 personas participaron en ellas. El paro en las universidades madrileñas fue prácticamente total, más de 100.000 estudiantes la secundaron y más de 30.000 participaron en asambleas y concentraciones.

La Policía desalojó la facultad de Derecho con bombas de humo lanzadas al interior del centro. Los estudiantes se dirigieron en manifestación hacia Moncloa y la Plaza de España. Individuos de paisano, armados, agreden a los manifestantes. En la Gran Vía un bote de humo disparado por la Policía alcanzó directamente en la cabeza a Mari Luz y le provocó un traumatismo craneal en la región parieto-occipital derecha, con fractura múltiple de la bóveda craneal. Una herida mortal.

*24 DE ENERO. MADRID

Luis Javier Benavides Orgaz (26 años), Francisco Javier Sauquillo Pérez del Arco (29 años), Serafín Holgado de Antonio (27 años), Enrique Valdelvira Ibáñez (34 años) y Ángel Rodríguez Leal (26 años). Calle Atocha 55. Despacho de abogados laboralistas de CC.OO. y militantes del PCE. Un comando ultraderechista, vinculado al sindicato vertical del Transporte y a Falange, entra en el despacho y dispara sobre todos cuantos se encontraban allí. Resultan muertos Luis Javier, Francisco Javier, Serafín, Enrique y Ángel, y quedan gravemente heridos Miguel Sarabia Gil, Alejandro Ruiz-Huerta Carbonell, Luis Ramos Pardo y Lola González Ruiz, esposa de Francisco Javier Sauquillo.

Al entierro de los abogados asistieron más de 100.000 personas. La acumulación de 7 asesinados en 2 días hacía temer al gobierno una respuesta popular radical contra el fascismo. El PCE jugó su papel e hizo demostración de su capacidad de control de las movilizaciones, trabajando codo con codo con la Policía Nacional. Son muchos los que opinan que fue en ese momento y con ese comportamiento cuando el PCE “se ganó” su legalización, que tuvo lugar tres meses después.

La Audiencia Nacional condenó a los acusados a un total de 464 años de cárcel. A los autores materiales, José Fernández Cerrá y a Carlos García Juliá, se les condenó a 193 años cada uno, y a Francisco Albadalejo Corredera, a 63. Ninguno cumplió más de 15 años y alguno de ellos trabajó posteriormente para los servicios de seguridad del Estado. El juez Gómez Chaparro, del Tribunal de Orden Público, se negó a profundizar las investigaciones, de manera que según denunció la acusación particular: “Faltan las cabezas pensantes. No nos dejaron investigar. Entre los acusados falta Fernando Lerdo de Tejada a quien este juez concedió un permiso, antes del juicio, que aprovechó para escaparse. No se ha sabido más de él. Era de una familia “influyente” del franquismo. Hizo labores de vigilancia.

Las investigaciones apuntaban hacia los servicios secretos”. En 1990, el primer ministro italiano Giulio Andreotti declaró que en este atentado había participado Carlo Ciccuttini, miembro de la organización secreta anticomunista Gladio, dependiente de la CIA.

*24 de enero, fallece en Valencia el militante del FRAP Eduardo Serra Lloret, a causa de brutales torturas.

*5 de febrero, Vicente Basanta López asesinado por un policía cuando pintaba “Trabajo sí, policía no”.

*24 de febrero: Francisco (“Pancho”) Egea, 19 años. Asesinado por la policía nacional en Cartagena (Murcia), durante una manifestación de trabajadores de la construcción y el metal.

*8 de marzo, la Guardia Civil, ametralla y mata en Itsaso (Gipuzkoa), a Nicolás Mendizabal Barandiaran “Zaharra”, de 30 años de edad y a Sebastián Goikoetxea Mariezkurrena “Sebas”, de 29, ambos militantes de ETA.

*13 DE MARZO. SAN SEBASTIÁN

José Luis Aristizábal Lasa. 20 años. Estudiante en la Escuela Superior de Técnica Empresarial de Gipuzkoa. Balazo de goma en la cabeza, en una manifestación pro amnistía.

*20 DE MARZO. BARCELONA

Ángel Valentín Pérez. 24 años. Obrero de la construcción. Apuñalado por ultraderechistas en el transcurso de una manifestación en la Plaza de Sant Jaume.

*30 DE MARZO. SAN SEBASTIÁN

Isidro Susperregui Aldaco. 68 años. Pelotazo de goma, el día 15 de marzo.

*12 DE MAYO. RENTERÍA (GUIPÚZCOA)

Rafael Gómez Jáuregui. 68 años. La respuesta popular a las manifestaciones es masiva. La Guardia Civil carga con sus jeeps contra los manifestantes, y dispara fuego real. Cándido Peña cae gravemente herido de bala en el pecho. Rafael Gómez Jáuregui cae muerto, acribillado por una ráfaga de subfusil.

Dibujo. (joven ondea bandera amnistía)

*13 DE MAYO. PAMPLONA (NAVARRA)

José Luis Cano Pérez. 27 años. En un lugar próximo, en la confluencia de la calle Calderería del Casco Antiguo con la Bajada de Javier la Policía Armada atrapó a José Luis Cano, al que habían visto tirar una piedra, y lo introdujeron en el bar Manuel (actualmente bar Imanol), donde fue golpeado y pateado. El disparo a corta distancia en la nuca, efectuado por un cabo de la Policía Armada, lo remata. Alfredo García, entonces alcalde de Ansoáin, fue testigo de los hechos y declara que siguieron golpeándole una vez que se escuchó el disparo. El cabo fue reconocido posteriormente por varios testigos, pero nunca llegó a ser procesado.

*13 DE MAYO. RENTERÍA (GUIPÚZCOA)

Clemente del Caño Ibáñez, trabajador de la autopista Bilbao-Behovia atropellado por un vehículo que circulaba a elevada velocidad cuando retiraba una barricada cerca de Rentería, obligado a ello por la Guardia Civil.

*13 DE MAYO. ORTUELLA (VIZCAYA)

Manuel Fuentes Mesa (30 años). Sale de una despedida de soltero con unos amigos. Varios jeeps de la Guardia Civil les rodean, los agentes se abalanzan sobre los muchachos y golpean brutalmente a tres de ellos. Manuel intenta huir y un guardia le dispara en la cabeza, por la espalda. Los jeeps se van dejándolo en medio de un charco de sangre.

*13 DE MAYO. PAMPLONA (NAVARRA)

Luis Santamaría Miquelena (72 años). Muere de un infarto a consecuencia del shock provocado por el impacto de una bala de goma en la pared de su balcón mientras era testigo de cómo golpeaba la Policía Armada a un muchacho en la calle San Nicolás.

*24 DE MAYO. RENTERÍA (GUIPÚZCOA)

Gregorio Maritxalar Aiestaran (62 años). Diez días antes había sido alcanzado por una bala que le atravesó el pecho cuando se encontraba en el balcón de su casa, viendo la manifestación pro-amnistía y siendo testigo de la feroz represión policial.

*29 DE MAYO. BILBAO (VIZCAYA)

Francisco Javier Núñez Fernández (38 años). Agonizó durante trece días: dolores terribles, vómitos de sangre, transfusiones… Todo comenzó el 15 de mayo, en plena semana pro-amnistía. Sale con su hija a comprar el periódico. De regreso a casa, se topan con una manifestación. Su hija cuenta: “Dos policías empezaron a golpearle brutalmente en la espalda y las piernas. Consiguió llegar al portal de casa. Los vecinos gritaban desde las ventanas, pedían que le dejaran en paz. Consiguió meterme en el portal, pero entraron detrás. Allí, sin testigos, siguieron dándole”. Francisco Javier acude a denunciar lo sucedido en los juzgados. Alguien avisó a los autores de la paliza. “Se presentaron en la puerta del juzgado en una furgoneta, vestidos de paisano pero con pistola, y le obligaron a subir al vehículo. Volvieron a golpearle, le ataron las manos, le pusieron un embudo en la boca y le obligaron a beber cerca de un litro de coñac y otro tanto de aceite de ricino”. Le dejaron tirado cerca de su casa. “Estaba totalmente reventado, el estómago, el esófago, el hígado…”

*12 DE JULIO. SÚRIA (BARCELONA)

Roque Peralta Sánchez: 27 años y padre de tres hijos de corta edad. Fue asesinado por un disparo de un guardia civil en el trascurso de una protesta de unos 150 jóvenes a los que se les impedía la entrada en el baile de las fiestas mayores de la localidad. El alcalde de Súria había ordenado la obligatoriedad de llevar corbata para poder acceder a la celebración y los jóvenes lo consideraron una imposición anacrónica e injusta y se rebelaron contra ello pidiendo unas fiestas populares. El sargento y dos números de la Guardia Civil acudieron a “poner orden” resultando herido de muerte el joven Roque Peralta. No hubo juicio, aunque de todas formas, el asesino quedó exento de culpa después de que fuera aprobada la Ley de Amnistía, en octubre de ese mismo año.

*16 DE SEPTIEMBRE. BARCELONA

Carlos Gustavo Frecher Solana. 28 años. El 11 de Septiembre se celebra la Diada Nacional de Catalunya. Era un día histórico. Más de un millón de personas formaron la manifestación, que recorrió las calles durante más de 5 horas, encabezada por la senyera. A su finalización, la Policía interviene en Las Ramblas. Carlos Gustavo sufre un pelotazo de goma en la cabeza, a consecuencia del cual muere días después.

Unas 6.000 personas asistieron al funeral convocado por todas las centrales sindicales de Cataluña en la parroquia de San Andrés. El interior de la iglesia estaba completamente lleno, mientras varios miles de personas se encontraban en el exterior.

*20 DE SEPTIEMBRE. BARCELONA

Juan Peñalver Sandoval. 60 años. Conserje de la revista satírica El Papus. Contra dicha revista iba dirigido el atentado. Le habían entregado un paquete, “del tamaño de una caja de zapatos”, para el Consejo de redacción. Estalló cuando lo subía en ascensor, entre la primera y la segunda planta del edificio. La onda expansiva alcanzó unos 40 metros, causando desperfectos en edificios y rotura de cristales de la calle de Tallera y plaza de Castilla.

La explosión destrozó de cintura para arriba a Juan, que murió en el acto. La telefonista, Rosa Loren, salió lanzada a la calle a través de la ventana por la violenta onda expansiva. Otra trabajadora, Rosa García, resultó también herida de gravedad. Aparte de ellas, hubo unos 15 heridos, la mayoría transeúntes alcanzados por cristales y pedazos de los edificios y coches reventados. La segunda planta quedó completamente destrozada.

El atentado fue reivindicado por la Triple A (Alianza Apostólica Anticomunista).

*7 DE OCTUBRE. ANDOAIN (GUIPÚZCOA)

David Salvador Bernardo. 45 años. Taxista. Aparece asesinado de dos tiros en la nuca, efectuados desde el asiento trasero de su taxi, en las cercanías de la estación de Andoain. La organización fascista Triple A (Alianza Apostólica Anticomunista) reivindicó el asesinato “por confidente de ETA”.

*14 DE OCTUBRE. BARACALDO (VIZCAYA)

Gonzalo Pequeño Moyano. 21 años. Viaja con su hermano en un coche. Según la Guardia Civil, se saltaron un control de carretera. Los agentes abrieron fuego y alcanzaron a Gonzalo, que falleció, y a su hermano, Luis Javier, que resultó herido. Los disparos en los controles eran muy habituales. El gatillo era fácil. La coartada era la posible pertenencia a ETA que, en este como en la mayoría de los casos, no era cierta. Baste señalar que ese mismo día, apenas un cuarto de hora después de la muerte de Gonzalo, una pareja de la Guardia Civil disparó sobre otro coche e hirió a José Antonio Igarza, su conductor, con idéntico argumento: se había saltado un control de carretera instalado en Sestao.

*16 DE OCTUBRE. ALICANTE

Miquel Grau. 22 años. Militante del Moviment Comunista del País Valencià. El 6 de octubre pegaba carteles en las calles convocando a la manifestación del Día Nacional del País Valencià que se celebraba el 9 de ese mes. Iba acompañado de otros militantes de su organización: Llum Quiñonero (24 años), Miquel Grau (22), Juan Ángel Torregrosa (19) y Javier Álvarez (14). Un militante de Fuerza Nueva, Miguel Ángel Panadero Sandoval, le lanzó desde su balcón un ladrillo que golpeó en la cabeza a Miquel y lo dejó en coma. Diez días después, en el Hospital 20 de Noviembre (hoy Hospital General de Alicante), falleció.

En su entierro acompañaron al féretro más de 18.000 de personas. El gobernador civil ordenó a los antidisturbios que cortasen el paso a la comitiva. Una vez allí arrebataron por la fuerza el féretro a la comitiva y lo llevaron en coche al cementerio, para abortar el acto de protesta. Posteriormente, cargó contra quienes pretendían llegar al cementerio y los dispersaron.

En Valencia, entre 8.000 y 10.000 personas participaron en el funeral organizado por 18 organizaciones políticas y sindicales.

*4 de diciembre, durante la celebración en Málaga de una manifestación a favor de la autonomía andaluza, muere por disparos de la policía Manuel José García Caparrós, de 18 años y militante del PCE.

*13 de diciembre muere en Tenerife, por disparos de la policía, el estudiante de 22 años Javier Fernández Quesada. “Yo no admito la palabra asesinato y usted debe retirarla por escrito” le dijo Martín Villa a un periodista incómodo.

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