Movimiento obrero. Sus luchas. Su situación:
-Huelga de los trabajadores de la recogida de basuras de la comarca de Nervión Ibaizábal, Bizkaia
Los trabajadores del servicio de recogida de basuras en los municipios de Etxebarri, Arrigorriaga, Ugao-Miraballes, Zaratamo, Arrankudiaga, Zeberio, Orozko, Orduña y Arakaldo han realizado huelgas los días 26 y 27 de diciembre y el 2 y 3 de enero, en defensa del desbloqueo de las negociaciones del convenio colectivo.
-El 90 por ciento de los contratos de trabajo que se registraron en 2019 fueron temporales
De los 20,7 millones de contratos registrados en 2019, 18,7 millones fueron temporales, cifra muy superior a la de 2007.
Además, el promedio de duración de los contratos temporales está por debajo de los 50 días, un mes menos que en 2007, alcanzando un récord de precariedad.
-El 43 % de los parados mayores de 55 lleva más de 4 años sin encontrar trabajo.
El 83% de los responsables de Recursos Humanos de empresas no han contratado a ningún mayor de 55 años en el último año.
Este colectivo ya representa el 13% del total de parados, frente al 7% que suponían hace una década.
Los de RR.HH. ponen estas pegas para no contratar mayores de 55 años: “sus conocimientos estarán obsoletos” (75%), “tendrá una menor flexibilidad” (60%), “no encajará en una plantilla mayoritariamente más joven” (34%) o su absentismo será superior, debido a mayores problemas de salud (25%).
¿Cómo pretenden entonces alargar la edad del jubilación?.
-El número de personas que viven en las calles de Mallorca crece un 44 % en cuatro años
El empleo basura y la burbuja inmobiliaria agravan la situación.
Pasan de las 156 personas contabilizadas en 2015 a las 225 en 2019. Las mujeres que viven en la calle se han duplicado, pasando de 24 a 49.
–https://www.diariodemallorca.es/mallorca/2019/12/22/numero-personas-viven-calle-crece/1473043.html
-Unificar las luchas obreras. Ir a la raíz
Opinión:
“Huelgas obreras y desnoticia es todo uno en la prensa burguesa, sea de gran mercado o sea localista. No nos escandalicemos. Es su labor precisamente.
Si el currela de la provincia no se entera ni de las huelgas obreras que hay en su entorno, ¿cómo imaginarnos otra frase generalizada que no sea?: “que los obreros pasan de todo, tío, que no se mueven, convéncete”.
Pues no, porque hay cientos de huelgas, conflictos, luchas obreras en todo el Estado que no ocupan en total ni un 1% de las noticias, mientras los deportes son la mitad de un telediario… Si no conoces, calla e infórmate.
Porque sí hay medios alternativos por los que se conocen la extensión de las luchas, las decenas y decenas de huelgas que se dan diariamente en decenas y decenas de empresas.
Pero el problema es mucho más profundo. Incluso en las huelgas diferentes en las mismas localidades, el desconocimiento entre conflictos es total. Un joven muy informado puede saber que 6 empresas de su ciudad están en huelga, pero resulta que no existe la menor coordinación entre estas luchas, y el ciudadano normal no conoce nada de ninguno de los 6 conflictos.
El primer culpable es la labor de los sindicatos que trabajan para la patronal. Atomizan las luchas y las convierten en cosa de liberados, cartas a los patrones y paciencia obrera. Y desprecian la coordinación de las luchas en una unificación de conflictos obreros. Siempre lo han hecho así desde hace 42 años.
Los intentos que existen de “coordinadoras de empresas en lucha”, lo son precisamente independientemente de esos sindicatos, de manera mucho más asamblearia y combativa. Y qué ‘casualidad’, al extender el conocimiento y unificación de las luchas obreras, se va sabiendo que en algunas hay despedidos, en otras criminalizados, en otras multados por una manifa o acción, en otras, verdaderos casos sangrantes… Y no es de extrañar, por ejemplo, que también la consigna de amnistía haya calado en las reivindicaciones, exigiendo la libertad de los sindicalistas presos por ejemplo.
Es extender el conocimiento, forjar la imprescindible unidad obrera, expandir las consignas populares. Eso es ir a la raíz, y o lo vamos consiguiendo, o nos esperan otros cuantos años de explotación, precariedad… y represión”.