
Paraguay
-30 presos políticos del EPP, decenas de campesinos, y condenas eternas a los militantes guerrilleros
Los presos políticos del Ejército del Pueblo Paraguayo (EPP) y Agrupación Campesina Armada (ACA), Juan Morínigo y Zunilda Jara Larrea, fueron condenados a 19 años de cárcel a finales de 2019. La situación de los presos políticos paraguayos es de pura represión y criminalización.
Pero
mientras,
la prensa en
2020 dice
que los
autores del mayor ataque a las fuerzas de seguridad paraguayas,
con ocho militares ejecutados en 2016, y por un tiempo abocada al
secuestro de miembros de comunidades menonitas, el Ejército
Paraguayo del Pueblo (EPP), tras años marcando con sus acciones
armadas el norte del país, parece se encuentra en repliegue.
Para
las autoridades se trata de un repliegue estratégico
que
obedece al cerco de la Fuerza de Tarea Conjunta (FTC), el combinado
de militares y policías creado en 2013 para combatir a la guerrilla,
fundada en 2008 como defensora de los campesinos de los deprimidos
departamentos de Concepción y San Pedro y
con una ideología socialista.
Algunos
estudiosos, por
el contrario, estiman
que la guerrilla marxista-leninista se halla en uno de esos periodos
de ‘inactividad’ de
grupos armados pequeños,
con acciones esporádicas en
este año 2020 como
la quema de infraestructuras de estancias agroganaderas.
El EPP nació en 2008, y alzó como bandera la lucha contra el uso de agrotóxicos por parte de los productores de soja. En ese marco, uno de los blancos del EPP han sido los secuestros de empresarios granjeros de las comunidades menonitas del norte, también dedicados a ese cultivo.
Represión como respuesta:
Ya en julio de 2010, la policía mató a Severiano Martínez, dirigente del EPP. En septiembre de ese año, la policía asesinó a Gabriel Zárate Cardozo y a Nimio Cardozo Cáceres. En abril de 2014, en un enfrentamientos, mueren los militantes del EPP Bernal Maíz y Silva Martínez. En ese año 6 presos políticos permanecen en las cárceles. En diciembre de 2018 realizan varias acciones armadas, al igual que en 2020.
En 2014 se produce una división en la organización guerrillera, creándose el ACA (Agrupación Campesina Armada), que tras varias acciones, desaparece al ser asesinados por la policía sus dirigentes, Albino y Alfredo Jara Larrea.
De acuerdo con un estudio, al EPP se le atribuyen 61 muertes (32 civiles –agroganaderos, explotadores…-, 18 policías y 11 militares), además de 114 ataques a haciendas ganaderas y bases policiales.
Difundir la situación de los prisioneros políticos:
La situación de sus presos políticos es de criminalización y aislamiento. Son 30 las presas y presos políticos del EPP. Además, hay que sumar a los numerosos campesinos y otros compañeros de dichas luchas presos en distintas cárceles del Paraguay, por colaborar con la guerrilla o actos anti agrotóxicos.